La Agencia de Recaudación de la provincia de Buenos Aires (ARBA) informó que se inició un proceso gradual de intimaciones que se extenderá hasta fin de año y alcanzará a 117.850 incumplidores, entre ellos profesionales, particulares y empresas, que ejercían su actividad económica sin estar inscriptos como contribuyentes del Impuesto sobre los Ingresos Brutos.
“La detección de los infractores fue posible a partir de tareas de fiscalización, cruce de datos y análisis de diferentes fuentes de información”, destacó Gastón Fossati, titular de Arba, que explicó que estas actividades “están gravadas por Ingresos Brutos en la Provincia, pero evadían ese tributo porque no se encontraban inscriptos. Según nuestras estimaciones, la deuda total alcanza $960 millones”.
Según agregaron desde el fisco, el 70% de los infractores está radicado en la zona metropolitana del territorio bonaerense, en tanto que el resto se localiza en distritos del interior. Respecto a las actividades que ejercen, abarcan diferentes rubros, entre ellos los servicios inmobiliarios, construcción, transporte, esparcimiento, hotelería, gastronomía, informática, turismo, fabricación de productos textiles, muebles, colchones, etc.
Fossati aseguró que “nuestro objetivo es que quienes estaban fuera de la economía formal se inscriban, regularicen su situación y paguen los impuestos que adeudan”, y remarcó que “al incorporar estos contribuyentes al padrón estamos sumándole mayor equidad al sistema, porque la carga fiscal se divide entre todos y, de esa forma, podemos seguir bajando la presión impositiva”.
Las notificaciones, que según los casos serán enviadas por medios digitales, postales o a través de agentes del organismo que visitarán cada domicilio, alcanzarán en primera instancia a quienes se les haya detectado un nivel de evasión mayor y, de manera gradual, incluirán en los próximos meses a la totalidad de los infractores.
Una vez que reciban la notificación, los particulares y empresas intimadas tendrán un plazo de 10 días hábiles para inscribirse como contribuyentes de Ingresos Brutos, constituir domicilio fiscal, presentar las declaraciones juradas y pagar los tributos adeudados, con los intereses correspondientes. El inicio del trámite de inscripción podrá efectuarse desdewww.arba.gob.ar.
En caso de que no se den de alta ni realicen un descargo para explicar su situación, la Agencia de Recaudación procederá a inscribirlos de oficio y les reclamará por vía judicial los impuestos impagos que surgen de no haber declarado oportunamente los ingresos de su actividad. A la vez, tendrá la posibilidad de aplicarles multas, clausuras u otras sanciones, en el marco de lo establecido en el Código Fiscal.
Según informaron, este año Arba modernizó sus herramientas de análisis fiscal, sumó nuevas fuentes de información e intensificó su labor para detectar, intimar y regularizar la situación de quienes prestan servicios, manufacturan o comercializan productos sin estar inscriptos en Ingresos Brutos, con el objetivo de formalizar la actividad económica, ampliar los padrones de contribuyentes y lograr una mayor equidad y justicia en el sistema tributario.
Anónimo dice
100.000 errados? Habría que dar vuelta las cosas a veces, tal vez la culpa es del Estado por ser tan ineficiente, caro, pesado, regresivo y no agregar valor alguno…? es para preguntarse 5 veces como hacen los japoneses..
Hay muchos casos de personas que no están inscriptas en Arba ya que para hacerlo se necesita una partida inmobiliaria, y muchos no poseen por tener domicilios en terrenos fiscales o viven en casas de familiares y no pueden justificar formalmente su domicilio por estar viviendo de hecho en lugares que difícilmente puedan justificar ese requisito.
Ampliar los padrones de contribuyentes y lograr una mayor recaudacion si, equidad y justicia en el sistema tributario nunca. ARBA lo unico que quiere es recaudar a como de lugar. El sistema de retenciones y percepciones es totalmente perverso y genera continuamente saldos a favor de los contribuyentes creando una presion fiscal que por lo menos duplica la que deberia pagar el contribuyente