Impulsada por trabajadores estatales y docentes, los gremios buscan reabrir la negociación salarial preocupados por la inflación o por los sueldos cada vez más afectados por el impuesto.
Como consecuencia de que cada vez más los sueldos son alcanzados por el impuesto a las ganancias, los gremios quieren reabrir la negociación salarial o adquirir una bonificación extra como compensación. Los sindicatos estatales y los docentes son los principales impulsores de la reapertura de las paritarias.
En cambio, desde los tres sectores de la CGT, la estrategia es otra. El plan es reclamar un bono para que pueda cobrarse a fin de año. El monto diferirá de acuerdo con la actividad.
La idea surgió del gremio de La Bancaria. Se garantizó un pago extra de $1250 por trabajador por el Día del Bancario, el 6 del mes próximo.
La posición más radical es la de los docentes de la Provincia de Buenos Aires que ya piensan en huelgas para la semana que viene. En tanto, los estatales de ATE también planifican protestas.
Mientras, desde el Ministerio de Trabajo de la Nación rechazaron cualquier posibilidad de reanudar las paritarias. El ministro Carlos Tomada ya dio por cerrado todos los acuerdos de 2012, a pesar de que aún le faltan casos por homologar.
El gremio de camioneros que encabeza Hugo Moyano no debatió aún sobre el pedido de un extra a fin de año, pero dirigentes confirmaron a ese diario que habrá una solicitud a las cámaras empresariales.
La CGT oficialista que encabeza el metalúrgico Antonio Caló también decidió ir a la carga por una bonificación adicional. Todavía no se definió una cifra, aunque ya se acordó que no será una exigencia grupal, sino particular de cada gremio. Su idea es además buscar una suba en el mínimo no imponible antes de fin de año. Un grupo de enviados de Caló realiza gestiones ante la Jefatura de Gabinete y se autoimpuso un mes de plazo para obtener alguna respuesta.
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